09-10-2008
Los equipos de los eurodiputados. ¿Quién y cómo ayuda a los miembros del Parlamento Europeo?
Audio
JavaScript & Adobe Flash Player nécessaire pour écouter
JavaScript & Adobe Flash Player nécessaire pour écouter
El trabajo de los eurodiputados implica continuos viajes entre Bruselas, Estrasburgo y su propio país, participación en comisiones y sesiones plenarias, redacción de leyes que conciernen el futuro de Europa, revisión y preparación de múltiples informes, encuentros con ciudadanos y lobbistas.
Para cumplir todas estas funciones cada eurodiputado cuenta con un sólido presupuesto y un equipo de asistentes y jóvenes profesionales en prácticas.
“En el Parlamento Europeo trabajan unos 4 a 5 mil funcionarios que podrían subdividirse en varios grupos”, aclaró a Radio Bulgaria Majori van den Broeke, jefa de la Oficina de Prensa del PE. “Parte de ellos se dedican a cuestiones administrativas, técnicas y de otra índole. Otros son responsables de las relaciones públicas. Los diferentes grupos parlamentarios también disponen de personal propio que se ocupa de cuestiones políticas. Finalmente, los propios eurodiputados tienen derecho a seleccionar y contratar colaboradores personales”, puntualiza la señora van den Broeke.
¿Qué principios se aplican en su selección y designación, y cómo son retribuidos?
“Para este fin el PE concede unos 16 mil euros al mes a cada eurodiputado, explica la Sra. Majori van den Broeke. Los diputados pueden contratar a uno, dos, tres o cuantos quieran colaboradores y tienen la libertad de determinar su retribución. Nosotros contamos con información solo de los colaboradores que trabajan en Bruselas o están acreditados ante el PE. Su número es poco más de mil. Sin embargo los diputados europeos no permanecen continuamente en Bruselas o Estrasburgo. Con frecuencia trabajan en su propio país. Es normal, puesto que tienen compromisos para con sus electores. Por eso contratan a colaboradores en sus despachos en su país de procedencia. El PE no dispone de información sobre el número de asistentes que tiene el eurodiputado en su país de origen. De principio, si un diputado es miembro de la Comisión de Presupuestos del PE, es habitual que contrate a colaboradores economistas o expertos en finanzas. A su vez un diputado miembro de la Comisión de Medio Ambiente del PE contrataría a un biólogo o ecólogo, pero la responsabilidad recae íntegramente sobre el diputado europeo, que tiene la obligación de controlar las decisiones tomadas por sus colaboradores y responsabilizarse del resultado final. El sistema que he descrito cambiará después de junio de 2009. Habrá dos tipos de colaboradores. Los acreditados ante el PE, que trabajen en Bruselas, cobrarán sueldos casi europeos. He dicho casi puesto que los funcionarios del PE se presentan a concursos. Los colaboradores en los despachos de los eurodiputados en Bruselas tendrán un estatuto propio, y en lo que se refiere a los colaboradores que trabajen en los países miembros, su contratación y retribución se efectuarán a través de agencias autorizadas. Estos serán los cambios más importantes. Naturalmente, los diputados seguirán teniendo la libertad de elegir a sus asistentes personales porque trabajarán a diario con ellos y lo justo sería que los conozcan muy de cerca. Las obligaciones, el modo y la naturaleza del trabajo seguirán siendo los mismos que ahora”.
La aprobación de cambios en el Reglamento de la Actividad de los Eurodiputados fue motivada por un sonado escándalo a raíz de haber contratado algunos eurodiputados a parientes suyos como colaboradores. A mediados de julio de este año, la Mesa del PE aprobó las nuevas medidas para el cumplimiento del Reglamento que pretenden una mayor transparencia en la labor del Legislativo comunitario. Estas medidas entrarán en vigor en 2009 después de las próximas elecciones parlamentarias europeas. Las nuevas normas establecen en detalles qué es el conflicto de intereses. Diana Wallis, miembro de la Mesa del PE y uno de los cuatro vicepresidentes del mismo explica:
“A mi juicio este problema tiene dos caras. En primer lugar, la persona que trabaje para un eurodiputado debería serle familiar y conocida. Hace falta una relación de confianza y, por consiguiente, esta relación cobra el carácter de una relación personal bastante importante. Por otro lado sin embargo debemos ser transparentes. Yo personalmente, cuando debí contratar a un nuevo asistente, publiqué la información en cuantos sitios pude hacerlo. Se presentaron unos 400 aspirantes. Realizamos el proceso más abierto y transparente posible de selección y designación. En la actualidad todo esto depende de cada diputado y su valoración personal de cómo debería proceder para contratar a alguien. Lo que queremos ver a partir de 2009 es un sistema mejor regulado para la designación de los asistentes, que establezca claras normas para su contratación y retribución. Técnicamente esto es bastante complicado”.
Lo más importante es que el asistente tenga la debida capacitación y esté en condiciones de ayudar al diputado europeo en su labor diaria, estima Daniela Penkova. Ella misma ha trabajado largos años en el sector no gubernamental, en organizaciones como la Sociedad Abierta y el Instituto Europeo, donde se ha dedicado a organizar diferentes eventos relacionados con la integración de Bulgaria en la UE. De profesión la Sra. Penkova es ingeniera. Ha hecho, además, la carrera de Integración Europea en la Universidad de Economía Nacional y Mundial de Sofía. En la actualidad trabaja como asistente parlamentario en el despacho del eurodiputado búlgaro Nikolai Mladenov.
“Mis colegas y yo hemos hecho carreras que se corresponden con la esfera de trabajo de Nikolai Mladenov, dice la Sra. Penkova. Mis dos colegas han estudiado economía, uno de ellos se ha especializado en París y el otro ha trabajado en el despacho de Meglena Kuneva, actual comisaria europea de Protección del Consumidor. Yo trabajo en el ámbito de la integración europea desde hace 15 años. De modo que todos los tres somos especialistas en este ámbito. Naturalmente, el dominio de idiomas es muy importante. Como mínimo, hay que dominar un idioma extranjero, y el dominio de otro más se ha vuelto ya casi obligatorio. Hay colegas que dominan hasta tres idiomas, lo cual es de enorme importancia al trabajar en el Parlamento. En la sala plenaria se hablan las lenguas oficiales de cada uno de los países miembros, pero en realidad el verdadero trabajo se hace en los pasillos, en las cafeterías, fuera de la sala plenaria, en la que luego se realiza la votación de hecho. De modo que si uno no domina idiomas y no intenta socializarse en la pequeña ciudad llamada , en la que hay de cinco a siete mil funcionarios dependiendo de si se incluyen sus tres sedes: Bruselas, Luxemburgo y Estrasburgo, no hay manera de que haga su trabajo. Nuestro equipo resultó muy agradable, siempre nos hemos sentido como una familia y nos entendemos perfectamente. Ya que la agenda de nuestro eurodiputado Nikolai Mladenov es muy apretada y suele tener de 15 a 30 entrevistas al día, debemos contar con una perfecta organización entre sí y trabajar muy bien en equipo. Y la verdad es que nuestro equipo lo hace bastante bien”.
¿Cuáles son las responsabilidades y las obligaciones de un asistente? Escuchemos nuevamente a Daniela Penkova
“Si el eurodiputado es activo, procura tomar el mayor número de informes en el parlamento, hacer más enmiendas a los textos legislativos discutida, etc. Para este fin necesita, naturalmente, asistentes, porque él no podría dar lectura a toda la documentación que nos llega pidiendo la opinión del parlamento, ni a toda la que pasa por las comisiones. El Sr. Mladenov es miembro de dos comisiones: la de Mercado Interno y Protección del Consumidor, y la de Política Exterior, de la subcomisión de Defensa y Seguridad y de tres Delegaciones de contacto con Afganistán. Evidentemente, para todos estos compromisos necesita ayuda. Cada eurodiputado tiene derecho a contratar a asistentes en el marco de determinada cuantía que le es concedida mensualmente. En la oficina somos tres: mis dos colegas le ayudan en su trabajo específico en las dos comisiones que integra, y yo soy responsable de la coordinación general del trabajo, de las entrevistas que debe mantener y, sobre todo, de su labor en Bulgaria. Todo diputado, además del trabajo que hace en el PE, debe trabajar también con sus electores en el país donde haya sido elegido”.
La Sra. Daniela Penkova reconoce que no obstante la carga que implica, el trabajo le brinda muchos momentos de satisfacción. Desde luego hay también muchos problemas y situaciones que la llevan al borde del infarto. ¿Cómo transcurre el día de un asistente parlamentario, concretamente, de Daniela Penkova?
“El día de Daniela Penkova está estrechamente relacionado con el día del eurodiputado búlgaro Nikolai Mladenov, comenta ella. Por la mañana venimos a la oficina entre las ocho y media y las nueve. Si el sr. Mladenov tiene antes reunión de alguna comisión, cosa que suele ocurrir, venimos a las siete y media, leemos documentos, preparamos todo lo que necesite para su trabajo en la comisión. El PE es una institución en la que llegan y salen continuamente correos electrónicos. Al venir a la oficina, me suelen esperar unos 200 mensajes que debo leer, valorar cuál de todos es urgente para el día, y si hace falta organizar entrevistas del Sr. Mladenov sobre cuestiones específicas en que él trabaja. Leer esta correspondencia toma bastante tiempo. Además cada asistente parlamentario tiene derecho a recibir un curso de idiomas organizado por el parlamento. En nuestra oficina estudiamos francés, de manera que las horas del almuerzo las tengo ocupadas por el francés, unas dos horas y media. Por la tarde tenemos reuniones, sobre todo cuando el sr. Mladenov tiene sesiones de las comisiones a que pertenece en Bruselas. En tal caso él tiene muchos compromisos con diferentes partes interesadas. A Bruselas suelen venir muchos lobbistas que piden cambios en la legislación examinada por las diferentes comisiones, de manera que con mis colegas procuramos limitar sus entrevistas únicamente a las que serían de utilidad para nosotros y para el Estado. El día suele transcurrir en llamadas telefónicas y conversaciones con distintas personas. Todo esto dura hasta las cinco o las seis de la tarde, luego de lo cual cada uno se dedica a las cosas que le gusta hacer. A mí personalmente me encanta pasear”.
La práctica ha demostrado que un eurodiputado puede contratar como colaborador a un representante de otro país miembro de la UE. Tal es el caso del eurodiputado búlgaro Cristián Vigenin y su asistente francés Etienne Cuche.
“Con el Sr. Vigenin nos encontramos en junio de 2007, poco después de las elecciones búlgaras de eurodiputado, comenta Etienne Cuche. Mi compromiso con él es resultado de nuestro interés común por trabajar conjuntamente. Yo llevaba algún tiempo trabajando en el PE y decidí ofrecer mis servicios a algún diputado de un país de Europa Central o del Este, de reciente adhesión a la UE. Por su parte Cristián Vigenin tenía interés en contratar a un colaborador con experiencia parlamentaria, procedente de alguno de los países que son antiguos miembros de la UE, y con la perspectiva, los conocimientos y los contactos de la vieja Europa. Creo que para todos es beneficioso que haya buen diálogo entre el Este y Occidente, para crear una Europa unida. Por otro lado tengo conocimientos sobre los temas en que él se especializa”.
Y he aquí lo que comentó este joven asistente parlamentario francés sobre su trabajo.
“Mi trabajo es muy variado y contiene un aspecto muy importante de los consejos políticos, lo cual hace que sea muy interesante. Consiste en ayudar a Cristián Vigenin y asesorarle en todas sus actividades de diputado europeo. El aspecto más importante es el consejo político relacionado con su trabajo como legislador europeo. Le ayudo a que esté bien informado, le propongo diversas iniciativas, etc. Al mismo tiempo todo está relacionado con sus compromisos políticos como eurodiputado. Otro aspecto importante es la relación con los electores búlgaros, porque el Sr. Vigenin los representa precisamente a ellos, al margen de trabajar también por y para todos los europeos. En este sentido le ayudo en las iniciativas que apuntan a crear un intenso contacto con Bulgaria. Invitaciones relacionadas con visitas, celebración de actividades culturales búlgaras en Bruselas y Estrasburgo, apertura de Centros de Información del Diputado en diferentes ciudades de Bulgaria, así como participación en conferencias en el país”.
¿Es reconfortante el trabajo del asistente parlamentario?
“Mi trabajo es muy apasionante y es un verdadero desafío, pero supone muchos compromisos y poco tiempo libre, dice Etienne Cuche. Como dije, es muy importante la dimensión política de mi trabajo y esto hace que sea interesante, pero hay que decir a la vez que el equipo de un eurodiputado es pequeño, suele constar de dos o tres colaboradores, lo cual significa que cada uno de ellos tiene importantes responsabilidades. Existe una proximidad natural con el diputado y esto supone la existencia de mucha confianza. Como resultado de esta confianza yo tengo una visión e influencia directas sobre nuestro trabajo y esto me atrae”.
Estimados oyentes, este programa es transmitido por Radio Bulgaria, RFI de Rumanía e Evelyn Radio de Francia en el marco del proyecto Ahora interactuamos con el Parlamento Europeo, ejecutado por el Instituto Europeo con apoyo financiero de la Dirección General de Comunicaciones del Parlamento Europeo.
Sus preguntas, reacciones, comentarios y sugerencias serán bienvenidos en nuestra redacción, así como en nuestro correo electrónico: info@europe.bg. Más detalles podrán conocer en el sitio web www.parliament.europe.bg
Por Maya Pelovska, Iva Letnikova, Elena Karkalanova, Blaga Georgieva
Versión al español por Raina Petkova.
Para cumplir todas estas funciones cada eurodiputado cuenta con un sólido presupuesto y un equipo de asistentes y jóvenes profesionales en prácticas.
“En el Parlamento Europeo trabajan unos 4 a 5 mil funcionarios que podrían subdividirse en varios grupos”, aclaró a Radio Bulgaria Majori van den Broeke, jefa de la Oficina de Prensa del PE. “Parte de ellos se dedican a cuestiones administrativas, técnicas y de otra índole. Otros son responsables de las relaciones públicas. Los diferentes grupos parlamentarios también disponen de personal propio que se ocupa de cuestiones políticas. Finalmente, los propios eurodiputados tienen derecho a seleccionar y contratar colaboradores personales”, puntualiza la señora van den Broeke.
¿Qué principios se aplican en su selección y designación, y cómo son retribuidos?
“Para este fin el PE concede unos 16 mil euros al mes a cada eurodiputado, explica la Sra. Majori van den Broeke. Los diputados pueden contratar a uno, dos, tres o cuantos quieran colaboradores y tienen la libertad de determinar su retribución. Nosotros contamos con información solo de los colaboradores que trabajan en Bruselas o están acreditados ante el PE. Su número es poco más de mil. Sin embargo los diputados europeos no permanecen continuamente en Bruselas o Estrasburgo. Con frecuencia trabajan en su propio país. Es normal, puesto que tienen compromisos para con sus electores. Por eso contratan a colaboradores en sus despachos en su país de procedencia. El PE no dispone de información sobre el número de asistentes que tiene el eurodiputado en su país de origen. De principio, si un diputado es miembro de la Comisión de Presupuestos del PE, es habitual que contrate a colaboradores economistas o expertos en finanzas. A su vez un diputado miembro de la Comisión de Medio Ambiente del PE contrataría a un biólogo o ecólogo, pero la responsabilidad recae íntegramente sobre el diputado europeo, que tiene la obligación de controlar las decisiones tomadas por sus colaboradores y responsabilizarse del resultado final. El sistema que he descrito cambiará después de junio de 2009. Habrá dos tipos de colaboradores. Los acreditados ante el PE, que trabajen en Bruselas, cobrarán sueldos casi europeos. He dicho casi puesto que los funcionarios del PE se presentan a concursos. Los colaboradores en los despachos de los eurodiputados en Bruselas tendrán un estatuto propio, y en lo que se refiere a los colaboradores que trabajen en los países miembros, su contratación y retribución se efectuarán a través de agencias autorizadas. Estos serán los cambios más importantes. Naturalmente, los diputados seguirán teniendo la libertad de elegir a sus asistentes personales porque trabajarán a diario con ellos y lo justo sería que los conozcan muy de cerca. Las obligaciones, el modo y la naturaleza del trabajo seguirán siendo los mismos que ahora”.
La aprobación de cambios en el Reglamento de la Actividad de los Eurodiputados fue motivada por un sonado escándalo a raíz de haber contratado algunos eurodiputados a parientes suyos como colaboradores. A mediados de julio de este año, la Mesa del PE aprobó las nuevas medidas para el cumplimiento del Reglamento que pretenden una mayor transparencia en la labor del Legislativo comunitario. Estas medidas entrarán en vigor en 2009 después de las próximas elecciones parlamentarias europeas. Las nuevas normas establecen en detalles qué es el conflicto de intereses. Diana Wallis, miembro de la Mesa del PE y uno de los cuatro vicepresidentes del mismo explica:
“A mi juicio este problema tiene dos caras. En primer lugar, la persona que trabaje para un eurodiputado debería serle familiar y conocida. Hace falta una relación de confianza y, por consiguiente, esta relación cobra el carácter de una relación personal bastante importante. Por otro lado sin embargo debemos ser transparentes. Yo personalmente, cuando debí contratar a un nuevo asistente, publiqué la información en cuantos sitios pude hacerlo. Se presentaron unos 400 aspirantes. Realizamos el proceso más abierto y transparente posible de selección y designación. En la actualidad todo esto depende de cada diputado y su valoración personal de cómo debería proceder para contratar a alguien. Lo que queremos ver a partir de 2009 es un sistema mejor regulado para la designación de los asistentes, que establezca claras normas para su contratación y retribución. Técnicamente esto es bastante complicado”.
Lo más importante es que el asistente tenga la debida capacitación y esté en condiciones de ayudar al diputado europeo en su labor diaria, estima Daniela Penkova. Ella misma ha trabajado largos años en el sector no gubernamental, en organizaciones como la Sociedad Abierta y el Instituto Europeo, donde se ha dedicado a organizar diferentes eventos relacionados con la integración de Bulgaria en la UE. De profesión la Sra. Penkova es ingeniera. Ha hecho, además, la carrera de Integración Europea en la Universidad de Economía Nacional y Mundial de Sofía. En la actualidad trabaja como asistente parlamentario en el despacho del eurodiputado búlgaro Nikolai Mladenov.
“Mis colegas y yo hemos hecho carreras que se corresponden con la esfera de trabajo de Nikolai Mladenov, dice la Sra. Penkova. Mis dos colegas han estudiado economía, uno de ellos se ha especializado en París y el otro ha trabajado en el despacho de Meglena Kuneva, actual comisaria europea de Protección del Consumidor. Yo trabajo en el ámbito de la integración europea desde hace 15 años. De modo que todos los tres somos especialistas en este ámbito. Naturalmente, el dominio de idiomas es muy importante. Como mínimo, hay que dominar un idioma extranjero, y el dominio de otro más se ha vuelto ya casi obligatorio. Hay colegas que dominan hasta tres idiomas, lo cual es de enorme importancia al trabajar en el Parlamento. En la sala plenaria se hablan las lenguas oficiales de cada uno de los países miembros, pero en realidad el verdadero trabajo se hace en los pasillos, en las cafeterías, fuera de la sala plenaria, en la que luego se realiza la votación de hecho. De modo que si uno no domina idiomas y no intenta socializarse en la pequeña ciudad llamada , en la que hay de cinco a siete mil funcionarios dependiendo de si se incluyen sus tres sedes: Bruselas, Luxemburgo y Estrasburgo, no hay manera de que haga su trabajo. Nuestro equipo resultó muy agradable, siempre nos hemos sentido como una familia y nos entendemos perfectamente. Ya que la agenda de nuestro eurodiputado Nikolai Mladenov es muy apretada y suele tener de 15 a 30 entrevistas al día, debemos contar con una perfecta organización entre sí y trabajar muy bien en equipo. Y la verdad es que nuestro equipo lo hace bastante bien”.
¿Cuáles son las responsabilidades y las obligaciones de un asistente? Escuchemos nuevamente a Daniela Penkova
“Si el eurodiputado es activo, procura tomar el mayor número de informes en el parlamento, hacer más enmiendas a los textos legislativos discutida, etc. Para este fin necesita, naturalmente, asistentes, porque él no podría dar lectura a toda la documentación que nos llega pidiendo la opinión del parlamento, ni a toda la que pasa por las comisiones. El Sr. Mladenov es miembro de dos comisiones: la de Mercado Interno y Protección del Consumidor, y la de Política Exterior, de la subcomisión de Defensa y Seguridad y de tres Delegaciones de contacto con Afganistán. Evidentemente, para todos estos compromisos necesita ayuda. Cada eurodiputado tiene derecho a contratar a asistentes en el marco de determinada cuantía que le es concedida mensualmente. En la oficina somos tres: mis dos colegas le ayudan en su trabajo específico en las dos comisiones que integra, y yo soy responsable de la coordinación general del trabajo, de las entrevistas que debe mantener y, sobre todo, de su labor en Bulgaria. Todo diputado, además del trabajo que hace en el PE, debe trabajar también con sus electores en el país donde haya sido elegido”.
La Sra. Daniela Penkova reconoce que no obstante la carga que implica, el trabajo le brinda muchos momentos de satisfacción. Desde luego hay también muchos problemas y situaciones que la llevan al borde del infarto. ¿Cómo transcurre el día de un asistente parlamentario, concretamente, de Daniela Penkova?
“El día de Daniela Penkova está estrechamente relacionado con el día del eurodiputado búlgaro Nikolai Mladenov, comenta ella. Por la mañana venimos a la oficina entre las ocho y media y las nueve. Si el sr. Mladenov tiene antes reunión de alguna comisión, cosa que suele ocurrir, venimos a las siete y media, leemos documentos, preparamos todo lo que necesite para su trabajo en la comisión. El PE es una institución en la que llegan y salen continuamente correos electrónicos. Al venir a la oficina, me suelen esperar unos 200 mensajes que debo leer, valorar cuál de todos es urgente para el día, y si hace falta organizar entrevistas del Sr. Mladenov sobre cuestiones específicas en que él trabaja. Leer esta correspondencia toma bastante tiempo. Además cada asistente parlamentario tiene derecho a recibir un curso de idiomas organizado por el parlamento. En nuestra oficina estudiamos francés, de manera que las horas del almuerzo las tengo ocupadas por el francés, unas dos horas y media. Por la tarde tenemos reuniones, sobre todo cuando el sr. Mladenov tiene sesiones de las comisiones a que pertenece en Bruselas. En tal caso él tiene muchos compromisos con diferentes partes interesadas. A Bruselas suelen venir muchos lobbistas que piden cambios en la legislación examinada por las diferentes comisiones, de manera que con mis colegas procuramos limitar sus entrevistas únicamente a las que serían de utilidad para nosotros y para el Estado. El día suele transcurrir en llamadas telefónicas y conversaciones con distintas personas. Todo esto dura hasta las cinco o las seis de la tarde, luego de lo cual cada uno se dedica a las cosas que le gusta hacer. A mí personalmente me encanta pasear”.
La práctica ha demostrado que un eurodiputado puede contratar como colaborador a un representante de otro país miembro de la UE. Tal es el caso del eurodiputado búlgaro Cristián Vigenin y su asistente francés Etienne Cuche.
“Con el Sr. Vigenin nos encontramos en junio de 2007, poco después de las elecciones búlgaras de eurodiputado, comenta Etienne Cuche. Mi compromiso con él es resultado de nuestro interés común por trabajar conjuntamente. Yo llevaba algún tiempo trabajando en el PE y decidí ofrecer mis servicios a algún diputado de un país de Europa Central o del Este, de reciente adhesión a la UE. Por su parte Cristián Vigenin tenía interés en contratar a un colaborador con experiencia parlamentaria, procedente de alguno de los países que son antiguos miembros de la UE, y con la perspectiva, los conocimientos y los contactos de la vieja Europa. Creo que para todos es beneficioso que haya buen diálogo entre el Este y Occidente, para crear una Europa unida. Por otro lado tengo conocimientos sobre los temas en que él se especializa”.
Y he aquí lo que comentó este joven asistente parlamentario francés sobre su trabajo.
“Mi trabajo es muy variado y contiene un aspecto muy importante de los consejos políticos, lo cual hace que sea muy interesante. Consiste en ayudar a Cristián Vigenin y asesorarle en todas sus actividades de diputado europeo. El aspecto más importante es el consejo político relacionado con su trabajo como legislador europeo. Le ayudo a que esté bien informado, le propongo diversas iniciativas, etc. Al mismo tiempo todo está relacionado con sus compromisos políticos como eurodiputado. Otro aspecto importante es la relación con los electores búlgaros, porque el Sr. Vigenin los representa precisamente a ellos, al margen de trabajar también por y para todos los europeos. En este sentido le ayudo en las iniciativas que apuntan a crear un intenso contacto con Bulgaria. Invitaciones relacionadas con visitas, celebración de actividades culturales búlgaras en Bruselas y Estrasburgo, apertura de Centros de Información del Diputado en diferentes ciudades de Bulgaria, así como participación en conferencias en el país”.
¿Es reconfortante el trabajo del asistente parlamentario?
“Mi trabajo es muy apasionante y es un verdadero desafío, pero supone muchos compromisos y poco tiempo libre, dice Etienne Cuche. Como dije, es muy importante la dimensión política de mi trabajo y esto hace que sea interesante, pero hay que decir a la vez que el equipo de un eurodiputado es pequeño, suele constar de dos o tres colaboradores, lo cual significa que cada uno de ellos tiene importantes responsabilidades. Existe una proximidad natural con el diputado y esto supone la existencia de mucha confianza. Como resultado de esta confianza yo tengo una visión e influencia directas sobre nuestro trabajo y esto me atrae”.
Estimados oyentes, este programa es transmitido por Radio Bulgaria, RFI de Rumanía e Evelyn Radio de Francia en el marco del proyecto Ahora interactuamos con el Parlamento Europeo, ejecutado por el Instituto Europeo con apoyo financiero de la Dirección General de Comunicaciones del Parlamento Europeo.
Sus preguntas, reacciones, comentarios y sugerencias serán bienvenidos en nuestra redacción, así como en nuestro correo electrónico: info@europe.bg. Más detalles podrán conocer en el sitio web www.parliament.europe.bg
Por Maya Pelovska, Iva Letnikova, Elena Karkalanova, Blaga Georgieva
Versión al español por Raina Petkova.